Damares Alves, ministra de Mujeres, Familia y Derechos Humanos de Brasil reafirmó ante la Organización de Naciones Unidas (ONU) el compromiso del gobierno de Jair Bolsonaro en favor de la vida, la familia y la libertad en la abertura de la 46ª sesión del Consejo de Derechos Humanos, este lunes 22 de febrero.
«Quiero reiterar que Brasil continua firme en la defensa de la democracia, de la libertad, de la familia y de la vida a partir de la concepción; continuaremos trabajando con este concepto en la promoción de los derechos humanos para todos, siempre recordando que no dejaremos a nadie en el camino», declaró.
La ministra expuso además el trabajo realizado para atender la necesidades más urgentes de mujeres durante el periodo de la pandemia, especialmente las más marginadas o en situación de vulnerabilidad. El gobierno brasileño ejecutó en 2020, el mayor presupuesto para esa área del último lustro, una inversión inversión cinco veces mayor que la de 2018.
Informó también los avances en materia de protección de derechos humanos de comunidades indígenas, niños y ancianos.
Desde la llegada del presidente Bolsonaro al poder, la política exterior brasileña dejó de respaldar las iniciativas que pretende imponer el aborto como un supuesto derecho «sexual y reproductivo» de las mujeres y pasó a tener un papel activo en el blindaje al derecho a la vida desde la concepción hasta la muerte natural y de la familia.
Brasil es uno de los más de 30 países signatarios de la Declaración de Ginebra, firmada el 22 de octubre del año pasado, que rechaza cualquier tipo de manipulación de los derechos de la mujer para promover el aborto como derecho o la perspectiva ideológica de género en los acuerdos multilaterales, y afirma la soberania de cada nación.
La intervención de la ministra Damares puede ser vista aquí, a partir de 5:55:55.